1 de septiembre de 2010

Joie de vivre

Ante la conocida crisis mundial, los hoteles cinco estrellas en la ciudad redefinen sus estrategias y se animan a convertirse en un punto de encuentro para los clientes locales. 

Con la promesa de seguridad y sofisticación, sumada a las propuestas diferenciales y no menos glamorosas, estratégicamente elegidas para el sector pudiente del público local, estos alojamientos cinco estrellas se han perfilado como nuevos centros de reunión e intercambio en la ciudad. 

Ya no sólo compiten entre sí por atraer a los huéspedes foráneos, sino que también buscan cimentar a la clientela vernácula (local); y para eso han abierto selectivamente sus instalaciones a porteños dispuestos a mudar sus reuniones sociales y de negocios a esos ámbitos. 

Como siempre, estos hoteles mantienen su estilo reservado y excelencia en el servicio y atención al cliente. Pero el pronunciado declive del turismo internacional y la necesidad de reinventarse y de captar nuevo público han ampliado la creatividad de las propuestas, dando lugar a nuevas estrategias de Marketing, buscando reposicionar a los cinco estrellas entre las preferencias de consumo de alta gama. 

En cuanto spa's y fitness center, por ejemplo el Palacio Duhau Park Hyatt y en el Alvear Palace Hotel cuentan con exclusivas membresías para que el público local haga uso de sus instalaciones. Además por una cuota adicional, los clientes pueden utilizar la pileta semiolímpica del Duhau, mientras que los del Alvear son seducidos por las duchas escocesas y los exclusivos tratamientos de belleza. 


El Sofitel Arroyo a las 19hs de los lunes, miércoles y sábados, realiza sus Soirées Culturelles en la Bibliotèque,  con su soberbio living con cómodos sillones de cuero oscuro y muebles de madera de caoba, acompañados por un trago de autor, el Can-Can e historias "secretas" de los monumentos históricos de la ciudad, invitan a una tarde placentera. 


En los jardines del Duhau se han realizado ferias de productos orgánicos, como también a toda hora, el Paseo de las Artes se llena de seguidores de pinturas y esculturas de artistas locales y latinoamericanos.


El festejo del centenario del Marriot Plaza, encajó perfectamente para invitar a la gente a un recorrido histórico por el primer hotel de lujo de América latina y, de paso, conocer los entretelones del paso de reyes, gobernantes y grandes luminarias por la Reina del Plata. 

El Caesar Park, una vez por mes, corre el velo a su ciclo de moda y té para las seguidoras de las últimas tendencias de ropa, con desfiles de Lacroix, Verónica del Canal, Homero, entre otros; y también realiza periódicos cócteles. 

Una de las suertes que tuve fue la de presenciar el Rojo Tango show en el Cabaret del Faena Universe, que debo decir es espectacular y si, gran parte de los asistentes son extranjeros. Mientras que en el restaurante El Bistro, empresarios locales discuten de negocios degustando de la cocina molecular del lugar, acompañados por una decoración de unicornios blancos. 

En el resto El Mercado, el ambiente es relajado y de color local, en donde el show de Anita Alvarez de Toledo en el Library Lounge envuelve a un clima de fiesta, que luego de terminado el espectáculo continúa una pista de baile hasta las 3am.


Los domingos y fechas patrias, se puede degustar al medio día en el Plaza Grill, el tradicional puchero de campo, o esperar a las 5pm para participar de la ceremonia del té en el majestuoso Roof Garden o en L'Orangerie del Alvear, o en el Piano Mobile del Duhau. 


En el ritual de puros cubanos acompañados por 20 variedades de maltas escocesas, se posiciona el Oak Bar del Duhau; mientras que el Alvear ofrece el Cigar Bar, único en la ciudad, con una exclusiva selección de habanos, con los mejores chocolates y los más exquisitos licores. 

Y es así como lejos de los diarios y la recesión mundial, estos espacios privilegiados de la ciudad encantan y contagian a los porteños burgueses en la joie de vivre

No hay comentarios:

Publicar un comentario